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jueves, 5 de mayo de 2016

Qué demonios está pasando con el género policíaco.



Buenas tardes, lectores. Hoy les quiero hablar de un tema que me tiene escamado, pero sobre todo sumamente decepcionado. Por el título de la entrada estarán sobre aviso. Pues eso, ¿Qué demonios le está pasando a este genero?
Antes de nada, para los que no sean asiduos de esta temática, pero sientan curiosidad... Una diferencia, no siempre es lo mismo género policial, que genero negro. El género negro implica unos ambientes turbios, problemáticos. Unos buenos totalmente perdidos y a veces echados a perder, unas historias que no tienen porque acabar bien, una serie de elementos determinados. El género policíaco no necesita de esa atmosfera negra y pesimista. Suele tratar historias ocurridas en el ambiente policial, investigaciones, homicidios... Pero no tiene porque ser necesariamente negro. Una novela policiaca puede ser negra, pero una novela negra no tiene porque ser policiaca. No se si me explico... Bien.
Pues ahora, con mi pregunta. Para mí, el genero policial, aunque no sea negro requiere de unas pautas. Partiendo de la base de que cualquier historia, sin hacer distinción de su formato (escrita, enviñetada, radiofónica o audiovisual) debe poseer personajes complejos, una historia de calidad, un hilo argumental consistente, sin que sea aburrido, pero tampoco atropellado, documentación precisa y real, si la historia la requiere, y una buena composición... Partiendo de esa base... Especificaré en lo que para mí, debe tener una historia de genero policial/detectivesco:
—Personajes creíbles y competentes en su rama. Si hablamos del detective jefe de la investigación deberá ser un tipo carismático, muy inteligente, pero con una inteligencia enfocada hacía la rapidez, hacía el ingenio. Una inteligencia que le permita pillar al malo, verlo venir, descubrir las pistas que nadie más ve. Y también duro. Y no me refiero a un machito de gimnasio. Me refiero a un tipo que no tiene porque ser un arma de matar, pero que tenga temperamento, que tenga aplomo, que no se achante ante el malo, el delincuente o criminal, ante su Némesis, vamos. Y para ello no tiene porque ser ni siquiera mortífero, aunque a veces viene bien, para mí esta faceta no es imprescindible. Y como el detective jefe podemos mencionar al villano que sea un criminal a la altura de su perseguidor, el forense que sea un científico puntilloso y capaz, el compañero o equipo policial que respalde al detective, o a la detective (estoy usando el masculino, pero obviamente los personajes no entienden de sexos, sino de profundidad).
—Una investigación bien hilada. No, no me sirve con que el malo se dejara el carnet de conducir en la escena del crimen y le pillen por eso tras darle muchas vueltas buscándolo, disparándole o lo que se le ocurra al vago de turno mientras escribe la historia y mete relleno. Tiene que ser una investigación que nos tenga desde el principio intentando averiguar, por nuestra cuenta quien es el criminal. Una investigación que nos sorprenda, que nos enganche, que nos meta presión como al investigador/a protagonista.
-Un procedimiento policial creíble. Por Dios, eso de que se monte la segunda guerra mundial cada vez que van a detener a un sospechoso, con persecuciones y tiroteos que destrocen media ciudad... Eso es mierda, siendo claros, y perdonen la expresión. Es para ofenderse. La acción extrema, quizás pueda ser un recurso del que echar mano en una novela así. En casos muy específicos y siempre llevada de la mano de un buen compositor (guionista, escritor, etc.) Pero ese recurso no puede ser el comodín que se eche cada vez que al que inventa la historia se le acaban las ideas. No es creíble, de la misma manera que no lo es el investigador/a que va rompiendo piernas en interrogatorios, en testimonios, declaraciones, juicios, conversaciones, monólogos, a sospechosos, delincuentes, cómplices, criminales, testigos, testigos presenciales, abogados, jueces, miembros del jurado, un niño que vivía un piso por debajo del sospechoso, el que le llevaba el butano a la víctima y un señor de Cuenca que estaba en le bar que hace esquina con el escenario del crimen tomándose un pincho de tortilla. No, la violencia extrema a cada minuto no es creíble y menos en una investigación policial o pseudo policial.
—Personajes secundarios que aporten a la historia. Sí, porque los personajes secundarios son necesarios, por un sinfín de motivos, darle profundidad a la historia, revelarnos pesquisas que no conocíamos, enseñarnos otros planos de la historia que no podemos vivir ni conocer a través del protagonista, y una serie de largos etc's. Pero son necesarios cuando aportan a la historia. Cuando son personajes que hacen la función de payasear sin ninguna gracia o ingenio... Pues no. Mejor nos los ahorramos. Lo siento mucho pero no. A mí no me aporta nada que un guionista barato meta en su serie un personaje excéntrico o raro secundario que se supone que nos tiene que hacer gracia porque según los crueles esteriotipos sociales, la gente como él, hace gracia. Y estoy hablando de cuando meten al gordo, feo, friki, raro, loco, tonto, chistoso de turno, que a la gente con dos dedos de frente no le hace gracia, sino que le resulta a decir verdad, bastante ofensivo.
—Personajes únicos. Ya he hablado antes de los personajes creíbles, competentes, a la altura. Pero sean protagonistas, secundarios o irrelevantes, por Dios... Que sean originales. Vale ya de usar el mismo molde para todo, estoy hartísimo. Harto de ver que siempre la historia va de un personaje excéntrico que coopera con la policía, y se convierte en el compañero del investigador policial de turno que suele ser una mujer atractiva y fuerte. Las quince primeras veces que lo vi, pasaba, pero es que por favor... Más originalidad... ¿Qué pasa, que el listo de la serie siempre tiene que ser un tío? ¿No hay mujeres forenses, mentalistas, escritoras, llenas de ingenio que ayuden a un policía? Es que resulta hasta machista que tantas veces salga la historia prototipo de chico listo, poli sexy porque es preciosa y es dura, que detienen malos... Es que cada vez hacen personajes más vacíos...
En fin, hay muchísimos puntos más, pero los más importantes a mi parecer son estos. Quizás porque son los más brutalmente violados.
Y de eso va la entrada señores, de como en la televisión y series, sobre todo pero cada vez más en el cine, y por desgracia en algunos libros, se están cargando el género policial, metiendo historias vacías pero espectaculares que parecen hechas para una audiencia totalmente idiotizada. Donde más lo he visto ha sido en las series de televisión, pero está saltando, como decía, al cine y dios santo, para mi horror a algunas novelas.
Estoy harto ya de ver la historia prototipo donde los detectives son unos "mataos" que no averiguan una mierda, sino es por la ciencia forense, que sí, que es muy importante, pero joder, ¿Donde ha quedado el instinto policial? Es ficción, dadnos un poco más de profundidad, tomaros alguna licencia... Los polis esos que serían unos muertos de hambre sino fuera porque el laboratorio les dice siempre quien es el culpable, dan vergüenza ajena.
También me refiero dentro del mismo tipo de historia prototipo vacía en cada aspecto y pilar de la misma, a los polis, que cuando llevas quince minutos de lectura o visionado, ya están cargados de armas, fusiles, granadas, helicópteros y grupos operativos, en plan comando asaltando a troche y moche y vaciando cargadores de quince en quince. Que a veces en vez de una historia policial parece una historia bélica. Por cierto aquí también podríamos meter a los polis/investigadores vacíos que rellenan sus carencias argumentales con una violencia brutal e innecesaria matando/golpeando a todo lo que se menea.
Y no nos olvidemos de las historias personales tan vacías, como el resto del argumento, que tratan de meterle profundidad a la historia, y son totalmente inverosímiles. Aquí también podríamos meter a los personajes secundarios innecesarios y odiosos.
Y bueno lo de los personajes sacados de molde, y las parejas formadas por chica-arma-objeto y chico-investigador-putoamo... Bueno yo es que mandaría a Siberia a los que no paran de crear esas historias. Por dios santo, ¿soy al único que le parece sexista que la chica esté completamente perdida, siempre, sin el investigador encantador y excéntrico?
En fin, creo que me está quedando una entrada muy larga ya, y podría tirarme horas despotricando... Si queréis un día quedamos y hacemos debate.
Pero hey ¿Por qué esperar? Déjame tu comentario abajo, en la caja de comentarios, con lo que opinas, si estás de acuerdo conmigo, o si no y piensas que soy un cretino. Dime que te parece, me interesa y me ayudaría a mejorar como escritor, quiero estar en contacto con vosotros, lectores, no me gusta hablar sólo sin cesar. Así que espero vuestros comentarios.
Y venga, voy a volverme loco. Entre los que sean sinceros y crean que soy un cretino y lo pongan en los comentarios, sortearé un libro de la librería. Ya veréis lo que me voy a reír.
Pero hey, he dicho cretino, no nos pasemos y abusemos de la confianza y me empecéis a faltar el respeto de forma gratuita. Que si no, el libro me lo quedo yo, y tan ricamente.
Bueno queridas y queridos. Me ha encantado, una vez más escribiros, seguimos en contacto.

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